Al secretario general de la ONU
CONFLICTO DEL GOLFO PÉRSICO
MENSAJE DEL SANTO PADRE JUAN PABLO II
AL SECRETARIO GENERAL DE LA ORGANIZACIÓN
DE LAS NACIONES UNIDAS
A su excelencia,
señor Javier Pérez de Cuéllar,
secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Nueva York:
En estas horas decisivas en que la humanidad angustiada dirige su mirada hacia el golfo Pérsico y no puede resignarse a la idea de la guerra, mi pensamiento se une a usted, excelencia, que se prepara a cumplir una misión de buena voluntad en Bagdad.
Invoco de todo corazón sobre su persona la bendición del Dios de la paz, a fin de que lo guíe y haga que sus esfuerzos encuentren una acogida favorable. Deseo ardientemente que la autoridad moral de la Organización que usted representa contribuya a hacer prevalecer el diálogo, la razón y el derecho, y que así se eviten opciones cuyas consecuencias serían desastrosas e impredecibles.
¡Que triunfe el bien supremo de la paz, tan deseado por todos los pueblos de la tierra!
Vaticano, 11 de enero de 1991.